Jordan Spieth y su deuda pendiente con el PGA Championship: el sueño del Grand Slam sigue vivo
En la historia del golf hay logros que trascienden la victoria. Ganar un major es un privilegio reservado a pocos, pero conquistar los cuatro grandes campeonatos del golf mundial —el Grand Slam— es un honor reservado para leyendas. En ese club exclusivo al que entró Rory McIlroy tras el Masters, es al que quiere ingresar Jordan Spieth, quien a sus 31 años, sigue persiguiendo el esquivo PGA Championship, el único que le falta.
Desde que irrumpió en el PGA Tour con una madurez competitiva asombrosa, Spieth se ha convertido en uno de los jugadores más destacados de su generación. Campeón del Masters y el U.S. Open en 2015 y del The Open en 2017, el texano ha estado a un paso de entrar en el olimpo de los más grandes. Pero cada año que pasa sin el trofeo Wanamaker parece un capítulo más en una historia de obsesión y frustración deportiva.
Un título que se le resiste
Jordan Spieth ha tenido múltiples oportunidades de conseguir el PGA Championship, pero el torneo le ha resultado tan escurridizo como desafiante. Su mejor resultado fue un segundo lugar en 2015 en Whistling Straits, detrás de Jason Day. Desde entonces, ha mostrado actuaciones irregulares, con cortes fallados, rondas inconsistentes o luchas internas con su swing.
A diferencia de otros majors, el PGA suele jugarse en campos más largos, que premian el poder desde el tee, una de las áreas más débiles en el juego de Spieth. Su fortaleza ha sido siempre su juego corto, su magia alrededor del green y su mentalidad competitiva. Pero para ganar este torneo, sabe que necesita una semana casi perfecta.

CHARLOTTE, NC – MAY 13: Jordan Spieth hits out of a bunker on the fifth hole during the PGA Championship at Quail Hollow Club on Tuesday, May 13, 2025 in Charlotte, North Carolina. (Photo by Maddie Meyer/PGA of America)
El peso de la historia
Hasta ahora, solo seis jugadores han logrado el Grand Slam en la historia: Gene Sarazen, Ben Hogan, Gary Player, Jack Nicklaus, Tiger Woods y el mencionado Rory McIlroy. Ni siquiera leyendas como Arnold Palmer o Tom Watson pudieron completarlo. Spieth ha estado cerca, pero los años pasan y los márgenes se hacen más pequeños.
“Quiero ganarlo, claro que sí. No solo por el Grand Slam, sino porque es un major. Pero sé que no puedo obsesionarme con eso. Tiene que llegar jugando buen golf, no pensando en la historia”, dijo alguna vez el texano con la madurez que lo caracteriza.
Quail Hollow, nuevo escenario del intento
En 2025, Spieth llega al PGA Championship en Quail Hollow con renovadas esperanzas. Conocedor del campo —sede habitual del Wells Fargo Championship y del propio PGA en 2017—, Spieth buscará equilibrar su juego para competir contra los pegadores largos, apoyado en su lectura de campo, creatividad y temple.
En un año donde ha mostrado destellos de su mejor nivel, el texano sabe que esta puede ser una de sus mejores oportunidades. Ya no carga con la presión de sus veinte años, pero tampoco tiene la ligereza de un novato. Está en el punto exacto donde el talento y la experiencia se cruzan con la urgencia de dejar huella.
¿El año del Grand Slam?
Jordan Spieth ya es campeón de tres majors, ex número uno del mundo y una de las figuras más queridas del golf, sin embargo, el ‘grand slam’ siempre retumba cuando se trata de hablar de metas, tal como sucedió con Rory. Si lo logra, se unirá a una lista sagrada.
El tiempo corre, pero el sueño sigue intacto.
Inspired by Rory. Focused on history.#PGAChamp pic.twitter.com/aqfLm35jKu
— PGA Championship (@PGAChampionship) May 13, 2025