El blog de Maribel | La presión

Hablar de presión no significa, necesariamente, hablar de algo malo y en este caso explicamos el porqué.

Maribel López Porras
Julio 2021

Crecí escuchando a muchas personas a mi alrededor hablar sobre la presión. He escuchado un sinfín de opiniones y creencias sobre su impacto en las carreras deportivas y cómo esta se debería manejar de la ‘mejor’ manera. Escribo la ‘mejor’ porque, con los años, me he dado cuenta de que no existe un tipo de presión que le haga bien a todo el mundo.

La presión cambia enormemente de persona a persona y, lo que le sirve a la persona de al lado, puede que no sea lo más benéfico para mí, algo que me ha llamado la atención. Vale la pena resaltar que no soy psicóloga, ni experta en este tema, pero lo que escribiré en esta entrada está basado en mi experiencia como golfista amateur y profesional, en los libros que he leído y en las charlas que he tenido con mis mentores a lo largo de la vida.

Empecé a pensar a profundidad sobre la presión y todo lo que esta significa, desde hace unos días, más exactamente mientras veía la transmisión del KPMG Women’s PGA Championship, major en el que Nelly Korda dominó el field y se convirtió en la nueva número uno del mundo. En dicha transmisión, la periodista afirmó: “La presión es la falta de confianza en uno mismo”. Algo que no pude sacar de mi cabeza pues esta es una frase muy fuerte.

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Desde ahí me enfoqué en la preparación y cómo la falta de esta tiene un efecto directo en todas las sensaciones que experimentamos como jugadores dentro del campo de golf. Algo que me hizo recordar una gran cantidad de frases, opiniones y creencias que he escuchado a lo largo de mi vida y quiero compartir con ustedes.

Esto lo hago con el fin de entender un poco más estos puntos en particular, buscar explorar nuestras creencias y, por qué no, abrir nuestra mente a analizar diferentes opiniones al respecto. Teniendo esto en cuenta, animo a todos los que me leen a cuestionar y escuchar pensamientos propios y ajenos, para poder seguir aprendiendo cada día más.

• Pensamiento, opinión, creencia #1: la presión siempre es negativa

He escuchado estas palabras una y otra vez y quienes las pronuncian suelen afirmar que el hecho de sentir presión no es positivo porque esto desata un sinfín de emociones negativas y comportamientos incomodos mientras juegan. Sin embargo, para mí, esto no es del todo cierto: la presión no es un rasgo negativo en todos los casos. He aprendido que hay tipos de presión, por lo que hay presiones positivas y negativas, así que lo que puede ser una presión positiva para un jugador puede resultar ser negativa para alguien más.

Las presiones positivas las conecto con pensamientos, sentimientos y creencias que, aun retando al individuo, permiten que este florezca y cumpla sus objetivos. Entretanto, las presiones negativas las asocio con los sentimientos y creencias que, además de hacernos sentir incomodos, no nos permiten ni avanzar ni crecer y mucho menos cumplir nuestras metas. Estas presiones negativas nos limitan como jugadores y no permiten que nos podamos desenvolver del todo.

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Y aunque muchas veces se hable más de las presiones negativas, también hay presiones positivas que nos enseñan a conocernos mejor y a identificar patrones y estrategias que sacan lo mejor de nosotros. Pero no solo esto, también hay presiones externas (sociales, pensamientos o creencias de personas a nuestro alrededor) y la influencia positiva o negativa de estas en nuestro rendimiento dependerá del significado que les demos.

• Pensamiento, opinión, creencia #2: La presión saca lo peor de mí

En charlas de torneos y competencias, muchas veces escuchaba cómo los jugadores mencionaban que la presión solamente sacaba a relucir sus peores rasgos y siento que esta es una de esas afirmaciones que no se pueden generalizar, pese a que su repetición es constante y un poco inconsciente.

La presión puede ayudar a que nos demos cuenta de qué características de nuestro ser merecen atención para poder mejorar en ciertos aspectos, de igual manera siento que las reacciones que catalogamos como buenas o malas son simplemente eso y cada persona les añade el significado.

• Pensamiento, opinión, creencia #3: Si no siente presión al momento de jugar es porque esto no le importa lo suficiente

Esta también es una afirmación a las que le falta fundamento, creo yo. Por un lado, siento que siempre habrá algún tipo y nivel de presión presente, bien sea externa, interna, positiva o negativa. Hay presiones que cada persona se impone, consciente e inconscientemente, como también hay personas a nuestro alrededor que nos tratan de presionar con expectativas ajenas.

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Que el individuo no reconozca el tipo de presión que está experimentando es una cosa, pero creo que la presión siempre estará presente. Si a la persona le importa, o no, lo suficiente su juego y su desarrollo como jugador, esto está ligado a un tema de metas personales, expectativas propias y sueños que, solo la persona que está jugando, conocerá realmente.

• Pensamiento, opinión, creencia #4: ¿No sabe manejar la presión? Olvídese de jugar golf a nivel competitivo

Afirmar que un jugador que no pueda manejar la presión de la mejor manera no puede florecer competitivamente es una afirmación injusta. En el golf, como en la vida, siempre estamos redescubriéndonos y aprendiendo más de nosotros mismos a medida que pasan los años, algo para lo que no se está dando posibilidad con esa afirmación.

Si hay disposición propia para mejorar y aprender de nuestras áreas de crecimiento, podemos transformar nuestra manera de gestionar la presión y usarla a nuestro favor.

• Pensamiento, opinión, creencia #5: Hay que aprender a jugar sin presión

Cierro con esta afirmación pues es la que más he escuchado. Muchos afirman que al jugar sin presión automáticamente llegarán los resultados que anhelamos, algo que no es cierto. Hay muchos factores, al momento de disputar algo, que entran en juego (edad, conocimiento de sí mismo, fortaleza mental, etc.,) los cuales alteran los tipos y niveles de presión.

Insisto, es difícil llegar al punto en el que no hay presión, pero esto no significa que esto no pueda suceder. En mi caso, por un par de años, cuando iniciaba mi carrera juvenil, recuerdo tener esta afirmación muy presente, sin embargo, después de muchas rondas jugadas me di cuenta de que por más que intentara no pensar en la presión o eligiera, con todo mi ser, ignorarla, buscando jugar más libre, esta se hacía presente. Por eso, jugar con o sin presión y usar esto a favor o en contra, es algo que decide cada jugador y que cambia muchísimo de uno a otro.