LAAC 2024: Colombia mejoró, pero sigue en deuda
La delegación del país cumplió un buen papel, pero seguimos sin poder dar el gran salto para festejar el primer título.
Una vez más Colombia se acercó al título del LAAC, pero no pudo conseguirlo. Esta vez el protagonista fue Santiago Fuenmayor, un golfista que hasta ahora empezamos a conocer en el país y quien firmó dos rondas bajo par a lo largo del certamen, dándose el lujo de jugar en el grupo final y de liderar una ronda, tal como lo había hecho en 2023, cuando tuvo su primera participación.
Fuenmayor, golfista de la Universidad de Oregon State, llegó luego de una mala actuación en el Abierto Sudamericano, disputado la semana previa en el Country Club de Bogotá, donde no logró sentirse cómodo y nunca encontró su juego, algo que sí consiguió esta semana en la que terminó como el golfsita más destacado del país y volvió a darle una alegría al golf nacional, que metió dos jugadores en el top 5 del certamen.
Sin embargo, lo hecho por Mateo y Carlos Ardila, quienes fueron los más destacados, no deja de hacernos pensar en que todavía se puede mejorar, que la clasificación vía World Amateur Golf Ranking (WAGR) se transforma en un problema para varias de las reales promesas del país y que, pese a que tengamos muy buenos jugadores juveniles o universitarios, para ellos no va a ser sencillo participar o ganar este ansiado evento.
De otro lado, más allá de los nombres y de lo que se viene haciendo, donde, consideramos, se podría llevar un mejor proceso en algunos casos, también se presenta algo llamativo: en la conclusión de la última ronda de Fuenmayor, quien estaba peleando con dos grandísimos jugadores mexicanos, buena parte del equipo no estuvo presente, algo que nos refleja un poco como país y como golfistas, cada uno por su lado.
En esa línea, es importante destacar lo de los mexicanos o los mismos argentinos, golfistas y delegaciones que siempre están ahí cuando están estas definiciones y que, si bien, en este caso era algo complicado por los horarios, sí se pudo apreciar en los últimos hoyos.
Para concluir, no está de más remarcar lo que está consiguiendo ‘Alto Rendimiento Azteca’ (ARA), con sus jugadores: golfistas a los que les dan la oportunidad de progresar, les planifican un calendario, trabajan en su rendimiento y los enfocan para que, llegado el momento, ellos solo tengan que pensar en golf. Algo que acá no se ha podido hacer porque cada uno tira para su lado y en lo que también se podría trabajar.
Todavía queda camino por recorrer, tanto para Fuenmayor como para Ardila y para todos los ocho golfistas del país que estuvieron en este LAAC, sin embargo, mientras algunas competencias sigan otorgando tantos puntos, no haya una real proyección a futuro, que es el objetivo principal de la competencia, y este camino se mantenga, será difícil tener un campeón, más allá de marcados casos puntuales.
