Dustin Johnson rompió las cifras y se quedó con su primer Masters
El estadounidense jugó su mejor golf, sacó buena ventaja sobre todos y llegó a números nunca vistos en Augusta con su -20
Dustin Johnson llegó confiado, pero en silencio, al Masters de Augusta 2020. Tras un resultado positivo en un test de Covid tuvo que parar durante dos semanas, pero volvió para el Houston Open y, pese a que no ganó, sí demostró estar en perfectas condiciones para lo que venía la semana siguiente.
El miércoles, en su ronda de práctica y con la parsimonia que lo caracteriza, afirmó que estaba jugando el mejor golf de su carrera y así lo evidenció durante la primera ronda en la que terminó como uno de los varios líderes, con un total de -7. El viernes fue un poco distinto, apenas pudo bajar dos golpes el par, pero esto fue suficiente par mantenerse ahí, en la pelea y pasar el corte con tranquilidad.
Jugó el mejor golf de su carrera
Ese mejor golf en su carrera, del que habló el miércoles, apareció apenas superado el corte, ronda de 65 el sábado y una diferencia amplia sobre los más cercanos perseguidores para empezar a acercarse a su primera chaqueta verde. Todos los tiros le salían, drivers al centro del fairway, ningún error ni en la ida ni en la vuelta y águila incluida para iniciar el día, evidenciaron que Dustin Johnson era candidato, un fuerte candidato cuya cara refleja muy poco y al que no es común verle ningún gesto.
Llegó el domingo y, aunque todo hacía prever una dura lucha contra grandes contrincantes, Sungjae Im y Cameron Smith apenas se le acercaron, mientras la impasibilidad de Johnson aprovechaba cada oportunidad, se sobreponía a cualquier error y marcaba una diferencia en cada impacto, que lo acercaba más al sueño de vestirse, de una vez por todas, con una chaqueta que solo tienen unos pocos.
Una marca en el Masters
Los números finales reflejan esa superioridad que lo hace imbatible, hoy por hoy, cuando juega su mejor golf: 68 impactos en su última ronda, récord total para el campo y el torneo con 20 golpes bajo par (algo a lo que nadie había llegado) y una distancia de cinco golpes sobre los más cercanos, quienes nunca lo pusieron en real peligro más allá de un par de bogeys consecutivos.
Al final, sentenciado el evento, la misma risa “parca” que lo caracteriza, abrazo con su familia, su hermano que ejerció de caddie y un par de cercanos, pero esa sobriedad con la que manejó el campo en el último día de competencia fue la misma con la que celebró, un tipo inexpresivo como pocos, pero que también juega un golf como pocos. Dustin Johnson se quedó con el título 2020 del Masters de Augusta.