Lucas Quintero Osejo: el sueño de ser profesional

Con sólo 9 años, Lucas Quintero es uno de los buenos prospectos que tiene el golf en Colombia y que seguro dará de qué hablar en los próximos años.

Admirador de Rory McIlroy, Camilo Villegas y Rickie Fowler, Quintero entrena 11 horas a la semana, recibe todo el apoyo de sus padres y ellos, aunque reconocen que se trata de una disciplina costosa, le dan las herramientas para que siga creciendo en este deporte que además de un significativo gasto económico, también implica sacrificios desde lo deportivo para llegar a los grandes circuitos.

En Nación Golf lo entrevistamos junto a sus papás y esto fue lo que nos dijo:

• Nombre: Lucas Quintero Osejo
• Nacionalidad: Colombiano
• Edad: 9 años
• Jugador favorito: Jason Day, Rory Mcilroy y Rickie Fowler

¿En qué curso está y la materia que más le gusta?
Estoy en tercero de primaria. Mi materia favorita es Matemáticas.

¿De dónde nace su afición por el golf? ¿A qué edad empezó a jugarlo?
Desde muy pequeño yo veía los torneos de la PGA con mi abuelo Carlos en TV y me empezó a gustar este deporte. Empecé a jugar a los 3 años.

¿Qué es lo que más le gusta del golf?
Que me puedo divertir, puedo pasarla bien.

¿Cuál es el campo que más le gusta y por qué? 
PGA National Resort, en Palm Beach, Florida.  Porque es muy colorido y el clima es muy estable todo el año.

¿Cuál es el Torneo que más le gusta o le ha gustado y en cuál le gustaría estar?
El torneo que más me gusta es el Masters de Augusta y es el torneo que me gustaría jugar.

¿Tiene algún ídolo en el golf colombiano?
Eduardo Herrera y Camilo Villegas.

¿Cuántas horas a la semana entrena y cómo entrena?
11 horas a la semana.

¿Cuál ha sido su momento más feliz como jugador?
Cuando me gane el mundial FCG Callaway World Championship en Palm Springs en el verano de 2016.

¿Cuál es su sueño como jugador?
Volverme profesional a los 18 años.

*Estas preguntas fueron resueltas por los padres:

¿Cómo acompañan a su hijo antes de un Torneo?
Generalmente lo llevamos a hacer reconocimiento del campo uno o dos días antes del torneo. Antes de jugar llegamos con tiempo suficiente para que pueda calentar y luego salir al campo.

¿Es difícil para un papá que su hijo sea golfista en Colombia? (Costos, acompañamiento, campos, patrocinios, etc)
En realidad el golf es un deporte costoso y hay que hacer un esfuerzo grande para que los niños una vez estén clasificados a los torneos más importantes del mundo puedan viajar a representar al país, en Colombia somos los papás quienes debemos asumir esos costos, sería ideal que se pudieran obtener ayudas y patrocinios de la empresa privada y de la Federación Colombiana de Golf para que los niños puedan tener los recursos para sus viajes y avanzar en este lindo deporte.

La competencia en el golf infantil es cada día más dura ¿cómo ayudan a su hijo para que no se sienta presionado u obligado a jugar?
La competencia es muy exigente y en la medida en que los niños vayan creciendo va a ser más dura.  Lo más importante siempre será que al niño le guste jugar golf y que lo disfrute por encima de los resultados, y  si quiere hacer una carrera en este deporte que sea su sueño y no el de sus padres, pues se necesita de mucho sacrificio, disciplina y dedicación.

Si en algún momento Lucas se cansa de jugar ¿qué harían?
Siempre lo vamos a apoyar y él lo sabe. En su caso él es quien siempre quiere estar jugando pues le fascina el golf, con 9 años falta mucho camino, lo que podemos hacer como padres es darle herramientas para que tome buenas decisiones y acompañarlo en su proceso.

¿Creen que en Colombia está creciendo el golf? ¿Cómo ven el golf infantil y cuáles creen que son los principales inconvenientes de la disciplina en el país?
Sin duda el golf infantil está creciendo en Colombia.  Creo que lo más importante es enamorar a los niños para que cada día les guste más el golf y darle más importancia a los procesos de los más pequeños, como lo hacen en otros países, pues ellos son el futuro del golf colombiano.

Al ser un deporte costoso ojalá los niños pudieran recibir ayudas, por ejemplo, que no se les cobre green fee para practicar en los clubes privados y públicos, o por los menos que les den tarifas preferenciales, actualmente son muy pocos los clubes que lo hacen.